viernes, 7 de octubre de 2011

Cómo decir no al cigarro


Se realiza la actividad lúdica propuesta en la Actividad Nº 3. Se forman dos equipos de cuatro estudiantes.
Se inicia la dramatización del equipo A:
Se describe el contexto de la situación: están en un carrete.
Uno de ellos le ofrece un cigarrillo a otro y trata de convencerlo de que fume, sus argumentos eran:
·         Es rico fumar.
·         El cigarro relaja y es rápido.
·         Uno no es ninguno.
·         Ayuda  a sociabilizar.

La otra compañera contra argumenta:

  •      No, porque me puede causar adicción.
  •          No, porque yo soy deportista y bajaría mi rendimiento.
  •          No, porque se ponen los dientes amarillos, mal aliento, etc.



Luego dramatiza el equipo B:
Se describe el contexto: en una casa.
Se inicia la dramatización y uno de ellos  trata de convencer al otro con los siguientes argumentos:

  •      Te hace ver “bacán”.
  •          Es entretenido echar humito.
  •          Te relaja, aunque no creas, especialmente si estas bajoneado.
  •          Te ayuda a estar en un grupo.


El otro compañero contra argumenta:

·         No, la piel se arruga.
·         No, se ponen los dedos amarillos.
·         Me da lata gastar plata en vicios.
·         No porque todos fumen, lo voy a hacer yo también.


Aquí se pueden aprecias algunas imágenes y un video de lo que  de lo que fue esta actividad






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